RESUMEN DE MEDIOS DE LA PROVINCIA DE SANTA FE
Santa Fe, Dom, 05 de may de 2024
RECIBIR NEWSLETTER

Politica 01.03.2017

PROVINCIALES

Ley de aguas, un debate que no se termina con las inundaciones

 El miércoles se realizó el primer foro sobre el tema y se hará otro en Rosario. El flamante secretario de Recursos Hídricos, Juan Bertoni, habló de las prioridades para su gestión. Otro punto es el acceso al agua segura.

Por: Agenciafe/UnoSantaFe /

El miércoles pasado se realizó en la ciudad de Santa Fe el primer foro para debatir el proyecto de la futura ley de aguas de la provincia. Dentro de dos semanas se realizará una actividad similar en Rosario y luego el tema sería habilitado por el gobernador, Miguel Lifschitz, para ser tratado en sesiones extraordinarias en la Legislatura, que ya había avanzado sobre el tema.
El año pasado el Senado aprobó por cuarta vez un proyecto de la senadora Cristina Berra y en Diputados hay dos proyectos (uno de Santiago Mascheroni y otro de Julio Eggimann). Pero paralelamente el Ejecutivo estuvo haciendo consultas a expertos y con el trabajo que recogerá de los foros de Santa Fe y Rosario buscará que la Legislatura apruebe un texto de consenso, con una mirada mucho más amplia de la que se tuvo sobre el tema hasta ahora, ya que se incorpora el acceso al agua potable como un derecho humano (ver aparte).

Las inundaciones de abril del año pasado y las de enero de 2017 que sufrió en gran parte de la provincia hicieron que la necesidad de legislar sobre los recursos hídricos esté en los primeros lugares de la agenda pública. El flamante secretario de Recursos Hídricos de la provincia, Juan Carlos Bertoni, le dijo a Diario UNO que "Santa Fe es la única provincia que no tiene un marco legal" sobre el tema.
—Bertoni, hace poco más de 20 días que está en el cargo, ¿cuál es la primera evaluación que hace de la situación hídrica de la provincia?
—Hicimos una primera mirada que nos indica que tenemos que trabajar fuerte en reforzar todo aquello que nos permita definir una política hídrica provincial y, en ese sentido, estuvimos trazando desde la Secretaría de Recursos Hídricos algunos ejes fundamentales.
—¿Cuáles son?
—Definimos tres ejes fundamentales de acción: el primero es la planificación de los recursos a nivel provincial, las macrorregiones. La provincia está dividida en siete regiones que son la costa del Paraná, de Santa Fe hacia el norte; otra de Santa Fe hacia el sur; una en la zona del Vila Cululú; la zona del Arroyo Colastiné; Carcarañá; los Bajos Submeridionales y la zona de General López. En términos generales son esas las siete regiones y en cada una de las regiones se está definiendo sus planes directores. El segundo eje es la definición de proyectos y obras integrales. Para eso estamos buscando financiación de la Nación y ya estamos en contacto con ellos para avanzar en esos proyectos. También acá tenemos proyectos a financiar con recursos propios, pero le estamos dando prioridad por su envergadura a aquellos que pueden tener una financiación de Nación. El último eje es la ejecución de obras que se divide en la ejecución de obras emergenciales, que son las de muy corto plazo, y las de corto y mediano plazo.
—¿Cuáles son a su entender las obras más urgentes?
—En estos momentos tenemos varios puntos de la provincia con fuertes procesos de inundación. En ese sentido, no podemos decir que hay una obra prioritaria porque en cada zona tenemos una obra prioritaria. Tenemos todo el proyecto del Cululú; en la zona del Colastiné todo el trabajo aguas abajo de la autopista; el análisis del derivador Oliveros; tenemos todo el estudio de toda la cuenca del Carcarañá. Nos falta tiempo para enumerarlo. Pero en cada región de la provincia tenemos una obra prioritaria y después hay una sucesión de obras.
—En un momento como el actual es muy difícil pensar en períodos de sequía porque se está pensando cómo sacar el agua que sobra en las distintas regiones de la provincia. ¿Esas obras pueden llegar a ser un problema al momento de que el agua escasee?
—Sí, estoy totalmente de acuerdo con ese concepto. Por eso quiero aclarar como autoridad de la Secretaría de Recursos Hídricos, que nuestra función no es drenar sin control la provincia, sino establecer una política hídrica provincial. Y como parte de conformar esa política hídrica está claro que nosotros tenemos que analizar las situaciones de extremos, tanto los máximos, que son los que estamos pasando ahora, como los mínimos, que son las sequías. Las sequías, desde el punto de vista económico y de la producción, tienen una afectación económica y social aún mayor que las inundaciones. Por lo tanto, nosotros tenemos la responsabilidad de estar pensando los proyectos también para esos escenarios.
—¿Cuáles son los pilares que debe tener esa política hídrica provincial que usted mencionó?
—Los pilares fundamentales son una combinación adecuada de medidas estructurales y no estructurales. Las estructurales son las obras. Puede ser un canal o puede ser un sector que sirva de acumulación de agua. La naturaleza escurre el agua de un lugar hacia otro, pero también se va almacenando progresivamente. Eso es lo que nosotros tenemos que trabajar, una combinación de obras de conducción y de regulación. Por otro lado, también tenemos que trabajar en las que nosotros llamamos "no obras", pero que son muy importantes. Un ejemplo es la ley de aguas, que es lo que vamos a discutir, los sistemas de monitoreo, los sistemas de alerta temprana. Esas son cosas que no hacen a una obra, pero sí a un complemento fundamental para que las obras se puedan mantener en tiempo y forma.
—¿Cuáles son los aportes que va a hacer la futura ley de aguas?
—A la Secretaría de Recursos Hídricos, que es la autoridad de aplicación, nos viene a cubrir el vacío legal que tenemos por no contar con una ley de aguas. Santa Fe es la única provincia que no cuenta con la ley de aguas.
—¿Cómo está la relación con las provincias vecinas con las que Santa Fe comparte cuencas y de las que recibe o a las que envía el agua?
—En estos últimos días estuvimos en contacto, a nivel de las secretarías de recursos hídricos, con Córdoba, con Buenos Aires y las relaciones son excelentes. En los últimos días hubo contactos con el gobernador de Córdoba y en los próximos días se está trabajando para una reunión tripartita para tratar el caso de La Picasa. Estuvimos con el ministro José Garibay con la ministra de Aguas de Santiago del Estero. Estamos trabajando aceleradamente para tener las mejores relaciones con todas las provincias sin por ello descuidar los intereses de Santa Fe, pero en un marco fraterno con los hermanos de las distintas provincias que limitan con Santa Fe.
El acceso al agua potable y el derecho a la salud
El debate de una ley de aguas también contempla la necesidad del acceso al agua segura para consumo como un derecho humano. El senador por Rosario y exministro de Salud de la provincia, Miguel Ángel Cappiello, participó del foro y, en diálogo con Diario UNO, se refirió a la importancia del acceso al agua segura. "El agua es parte fundamental de nuestro vivir. Cuando uno nace el 80% del cuerpo es agua y luego es entre el 60 y el 70%. Nosotros tenemos que trabajar para que todos tengan acceso al agua potable y en la cantidad que se necesita", sostuvo.
"Hoy hay lugares –agregó– en los que hay problemas, donde tienen que tomar agua de pozo, y hay lugares que tienen una cantidad de arsénico muy importante, como Carcarañá. En el norte también y el hidroarsenisismo crónico es producto de que no tenemos un agua segura".
Cappiello recordó que el Código Alimentario Nacional establecía que para 2012 había que tener cinco partes por millón de arsénico en agua. Pero ninguna provincia lo hizo y por eso desde el Consejo Federal de Salud se le envió a la entonces presidenta un pedido de prórroga y "ella lo suspendió definitivamente".
"Con los cinco acueductos que hizo la gestión del Frente Progresista y las plantas de ósmosis inversa estamos tratando de llegar a todos lados con agua segura. En la ley de suelo el agua tiene que estar; y también se discutirá el tema de los fitosanitarios", aseguró.
Por último, Cappiello dijo que "esto repercute en no tener el hidroarsenisismo crónico, en no tener las disentería que son las infecciones intestinales que a veces vienen con el agua como las amebas, la parasitosis y la Escherichia coli que causa diarrea y que en los extremos de la vida, en los recién nacidos y en los añosos muy grandes, puede llegar a causar la muerte. Si no tienen agua para tomar y a su vez, ese agua le causa enfermedades, estamos incumpliendo con una parte importante de la salud que es tener agua segura.

“Un libro no acabará con la guerra ni podrá alimentar a cien personas, pero puede alimentar las mentes y, a veces, cambiarlas”

Paul Auster