La ex presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner y su ex ministro de Economía, Axel Kicillof "tomaron parte central" en un "abuso de poder" para "dar curso a la maniobra de defraudación" contra el patrimonio del Banco Central que significó la venta de dólar futuro en los últimos meses del 2015, según el camarista Eduardo Farah.
 

Así lo advirtió uno de los miembros de la sala II de la Cámara Federal porteña, en consideraciones individuales que sumó a su voto conjunto con su colega Martín Irurzun.

 

"Fernández de Kirchner y Kicillof conocieron, con relación de inmediatez, la puesta en marcha y las consecuencias que tendría la maniobra, entonces, por pura lógica, resulta razonable concluir que aquella respondió a una indicación previa de su parte", sostuvo Farah al instar al pronto envío del caso a juicio oral.  

 

Tanto Irurzun como Farah descartaron los argumentos coincidentes de las defensas de los 15 imputados, en relación a que se trató de una decisión política no judiciable y en el caso de Farah remarcó que "hubo un fraude descomunal al patrimonio público". "Lo que aquí importa es si el Poder Judicial puede revisar o no lo que se hizo en este caso. Y mi respuesta es que sí", concluyó Farah en el fallo.

 

Farah entendió que "lo vital pasa porque hay pruebas suficientes para sostener que, en concreto, Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof tomaron parte central en la decisión de dar curso a la maniobra de defraudación contra el patrimonio del BCRA".

 

"Se pretende ocultar el verdadero significado de la acusación: ni más ni menos que un abuso de poder. Y es que esa acusación no versa sobre criterios, ideas o políticas de naturaleza económica, monetaria o cambiaria sino sobre el exceso o extralimitación en el ejercicio de un cargo público".

 

Esto ocurrió, agregó, "como consecuencia de haberse vendido dólares a futuro (atribución expresamente conferida al BCRA por la ley) a un precio que no era el de mercado, como mandaba -también expresamente- la misma ley, produciéndose como consecuencia de ello un cuantioso perjuicio al patrimonio público".

 

"No hace falta demostrar nada al respecto. Nuestra propia experiencia nos recuerda cuál era el valor real de nuestro peso argentino respecto del dólar, más allá de la voluntad de la autoridad económica de turno. Todos, indefectiblemente, entre septiembre y noviembre de 2015, reconocíamos que el valor del dólar estaba entre $ 14 y $ 15", concluyó.