Ganar es imprescindible. ¿Exagerado? Para nada. Newell’s necesita regalarse un triunfo. Para aliviarse, por un rato o por un partido. Es una época compleja en el club del Parque, con problemas de toda clase, y lo futbolístico no escapa a esa realidad. Por todo eso, el conjunto de Diego Osella debe hacer pie firme en Victoria y traerse tres puntos frente a Tigre para recuperar confianza y fuerzas.

  Tres partidos atrás, Diego Osella se hizo cargo del equipo, consciente de la dura misión que tenía por delante. Los intentos de un conjunto intenso y compacto no dieron hasta acá los resultados esperados. Y tampoco encontró el mejor resultado del fútbol: la victoria. Encima la última imagen no fue buena, con un pálido empate ante Rafaela.
  Ni esa noche se le dio el triunfo, pese a que ganaba 1-0 y el partido se moría. Nehuén Paz puso el pie y la pelota se metió en su arco. Antes hubo una caída con Lanús (0-3) en el sur del Gran Buenos Aires y la igualdad de local con Unión (1-1), en el inicio del ciclo de Osella.
  El entrenador entendió que ahora se requería un cambio. O mejor dicho cinco. Luciano Pocrnjic, Emanuel Insúa, Jalil Elías o Emiliano Franco (única duda que mantiene el entrenador), Hernán Villalba y Daniel Mancini fueron los elegidos para estar desde el arranque y que no estuvieron contra Rafaela (ver página 5). Y eso que iba a meter una modificación más, pero Marcos Cáceres se resintió y continuará Franco Escobar.
  La conformación de un medio que tenga “orden” y sea “agresivo” es un aspecto fundamental para Osella. Considera que desde allí nace cualquier intento de vulnerar a Tigre. Claro que la restante tarea, la más compleja, que es hacerse fuerte en campo contrario cerca del arco de Javier García, tendrá como responsables principales a Scocco, Maxi Rodríguez y Boyé, este último lo mejor que viene ofreciendo el rojinegro en la temporada.
  Tanto Scocco, cuyo juego no termina de levantar vuelo, como Maxi, intermitente pero que sigue pesando por jerarquía, se moverán apenas por detrás de Boyé. “Si sabemos alimentar a nuestro tridente ofensivo, Newell’s tiene chances de ganar”, subrayó Osella.
  Hoy el principal rival de Newell’s es el propio Newell’s. De todas maneras, no es un hecho menor la pobre actualidad de Tigre. Se parece a la de Newell’s, con una racha que los emparenta: un triunfo, dos empates y cuatro derrotas. Pero el rojinegro le saca algo de ventaja, mínima al menos. Es que el conjunto de Victoria se quedó sin DT por el despido de Mauro Camoranesi y encima tiene varias bajas (la formación no está confirmada).
  En un estadio en el que la presión hacia el local no será menor, Newell’s también carga con la suya. Sobrellevarla de la mejor manera será una de las tareas. La otra, mejorar el juego que mostró hasta acá para que Victoria no sea sólo el destino de esta noche, sino la meta a conseguir.

La tranquilidad y confianza de los jóvenes

Siempre se dice que para los futbolistas jóvenes es más sencillo incorporarse a un equipo que anda bien que a otro que está torcido. Esto último es lo que les tocará a Daniel Mancini y Jalil Elías o Emiliano Franco. El entrenador rojinegro depositó la confianza en ellos, quienes deberán responder a las exigencias que requiere este presente de Newell’s.
  ¿Cómo se trabaja con juveniles que aparecen en un equipo obligado a torcer el rumbo? Osella tiene la respuesta: “Dándoles confianza y haciéndoles entender que son oportunidades que llegan y que no son determinantes en sus carreras, sino que deben aprovecharlas, disfrutarlas y tomarlas con total naturalidad”.
  Mancini tendrá su segundo partido de titular en Newell’s, lo mismo que Jalil, siempre y cuando Osella lo confirme, caso contrario jugará Franco, que aún no debutó en primera.
   “A los jóvenes se les debe dar tranquilidad y decir que si los vamos a poner es porque estamos convencidos de que están preparados para eso”, dijo el entrenador.