La experiencia muchas veces cuenta, pero en situaciones límite como suelen ser los clásicos si no se tiene hay que disimularla. Manuel García será uno de los debutantes en el derby rosarino. En las últimas cuatro veces estuvo en el banco (sólo se perdió el del torneo Inicial 2013, por lesión), siempre a la sombra de un Mauricio Caranta que hoy ya no está en el club. Por eso la chance para el Melli (esperada por cierto), quien vive la previa, según dice, con “mucha calma”, pero a la vez “con ganas”, intentando dar “lo máximo” en cada entrenamiento para llegar en el mejor nivel posible.

  “Va a ser mi primer clásico. La verdad que estoy contento porque en este momento me toca, pero lo llevo tranquilo, trabajando muy bien durante la semana. Estoy calmado pero esperando el partido con todas las ganas”, dijo el arquero canalla en el mano a mano que mantuvo con Ovación en la previa de un fin de semana especial en su carrera, a punto de vivir algo totalmente nuevo y que será un enorme desafío.
  “En líneas generales soy de estar tranquilo. No soy una persona que se exalte demasiado, aunque cuando se acerque la hora del partido es lógico que uno vaya pensando distintas cosas. Ahí la ansiedad puede jugar un papel distinto, pero por ahora lo llevo todo con mucha tranquilidad”, se explayó Manuel García, un producto de la cantera que cuenta con varios derby en su haber, pero todos en inferiores y reserva. Algo totalmente distinto a lo que vivirá el domingo cuando salte al césped del Gigante.
  “No se parece en nada aquella etapa a esta. Ya estuve varias veces en el banco en primera y todo se vive de una manera distinta. Se respira otro aire, por la gente y por lo que significa la previa. Igual, pese a las diferencias, acá en Central los clásicos son importantes siempre, sea en primera como en inferiores”, reflexionó.
  —Hoy es cuando vos y varios otros jugadores lamentan que los partidos de reserva se jueguen al otro día, sin gente. Más que nada por el tema de la aclimatación cuando se llega a primera.
  —Totalmente. Me tocó jugar algunos clásicos en nuestra cancha como preliminar, pero muchas otras veces sin gente y está claro que no tiene nada que ver una cosa con la otra. El marco, el ambiente es un mundo aparte. En este caso para mí va a ser nuevo.
  —Y en lo que tiene que ver con el día a día en los entrenamientos, ¿hay cosas que intentás potenciar o la preparación es la misma?
  —Son las mismas. Los arqueros entrenamos siempre de la misma manera. Lo único que cambia es que el rival es Newell’s, pero no más que eso. Los entrenamientos son igual de intensos de cara a un partido tan importante como éste.
  —¿Teniendo en cuenta que va a ser tu primer clásico, tenés pensado arrimarte a algún compañero o alguien del cuerpo técnico, teniendo en cuenta que el arquero es uno de los jugadores que más tranquilo debe estar?
  —Todavía no. Por ahora la semana viene igual a todas. Sólo pienso en entrenar fuerte, en ponerme a punto y en estar preparado. Uno se va poniendo el partido en la cabeza sin consultar a nadie. Sí me puede jugar a favor que ya estuve varias veces en el banco y lo viví desde adentro. Trato de vivirlo a mi manera, con mi tranquilidad y mis ansiedades.

   —¿Sentís que el clásico se vive con la misma intensidad por parte de los hinchas o que esa adrenalina va creciendo año tras año?
  —No estuve en otro clásico que no sea el rosarino, pero soy de acá y sé cómo se pone la gente. La semana previa en la calle se siente mucho y eso es lindo, siempre y cuando haya un respeto mutuo. Todo eso es lo que hace al rosarino como un clásico diferente al resto.
  —¿Y que la gente lo viva tan intensamente los ayuda a ustedes o les mete más presión?
  —Es lindo. La ciudad es así y los que vienen de afuera también te lo dicen.
  —¿La racha positiva que arrastran contra Newell’s los puede soltar un poco más, creés que la presión puede ser mayor del otro lado?
  —No creo. Los clásicos son únicos y no importa cómo llegue cada uno. A nosotros nos tocó llegar abajo en la tabla y ganar y otras veces fue al revés. Obviamente nosotros vamos a ir a buscar el resultado. Ojalá podamos potenciar nuestras virtudes y explotar las falencias del rival.
  —¿No sienten un peso extra por sentir que les cuelga el mote de candidato, como pasó en el último clásico?
  —No, para nosotros es igual siempre. Ayuda que el equipo llegue en un buen nivel pero nada es determinante.
  —Coudet le dijo a Ovación que “es mejor la ambición de ganar que el miedo a perder”, ¿ese es el espíritu con el que piensan encarar el partido?
  —Seguro. Hay que acostumbrarse a ganar y es lo que tenemos en la cabeza, sabiendo que muchas veces las ganas te pueden jugar en contra. Fue lo que nos pasó en el último clásico, en el que nos atropellamos demasiado sin pensar lo que teníamos que hacer.
  —Ese último clásico les va a servir como experiencia.
  —Totalmente. Lo tenemos como medida y está bueno saber lo que nos pasó. La clave está en animarse e intentar pero siendo pensantes.
  —¿Qué tan fuerte puede ser un espaldarazo en el clásico teniendo en cuenta lo que se viene?
  —Puede ser importante. Un triunfo en un clásico sirve como envión pero nosotros sabemos que tenemos que ir partido por partido. No podemos jugar contra Independiente sin pasar antes en Newell’s. Obviamente que ganar nos daría mucha más fuerza.
  —¿Sos de estudiar a los rivales, en este caso sabés por dónde pasan las virtudes de un Maxi Rodríguez, un Scocco o un Boyé?
  —Sí, miro bastante fútbol, pero además el cuerpo técnico siempre nos entrega un pendrive con movimientos del rival. Lo hacen todas las fechas y está bueno.
  —¿Llegan con más confianza que confiados?
  —No llegamos confiados. La confianza sí la tenemos porque sabemos lo que hacemos durante la semana. Trabajamos para algo, preparamos cada partido y sabemos lo que tenemos y podemos dar. Tenemos confianza pero jamás nos confiamos de nada ni de nadie.

Sobre Sosa, el nuevo competidor por el puesto. “Como persona es excelente. Se adaptó muy rápido al grupo y a la forma de trabajar. Y que se esfuerce hace que yo también tenga que exigirme al máximo”, dijo el Melli García sobre Sebastián Sosa. Y agregó: “Si todos tiramos para el mismo lado las cosas se hacen más fáciles porque el bien de uno será el bien de todos”.