Generalmente, cuando se recomienda que un producto reemplace a otro, comenzamos a probarlo en determinadas comidas o momentos. Por ejemplo, algunos usan edulcorante para un café, pero no para el mate, mientras que otros prefieren el azúcar a la stevia para determinadas bebidas o alimentos. Con el azúcar mascabo ocurre lo mismo: se la utiliza en algunos casos, pero no en todo momento.

Hoy, en tiempos en que la tendencia por cuidarse un poco más se expande a todos lados, el mundo sufre con las cifras de sobrepeso y obesidad. Por eso, la cuestión de la alimentación es muy importante ya que abunda la comida industrializada y procesada, muy dañina para el ser humano. En ese escenario, cualquier modificación a la dieta diaria con alimentos saludables, es una buena noticia para nuestro organismo.

El azúcar mascabo llegó para incorporarse como un alimento necesario y para quienes quieren seguir endulzando sabores de forma más sana, pero la pregunta es por qué no se la consume a todo y sí a determinados alimentos o bebidas. Ante esto, primero hay que explicar que este tipo de azúcar es una variable integral y más pura, es decir, no está refinada. Además, no hay que confundirla con el azúcar negra, ya que esta también es refinada pero se le añade melaza.

Al ser más pura, contiene pequeñas cantidades de los nutrimentos propios del jugo de caña como antioxidantes y algunas vitaminas del complejo B y minerales como el potasio, magnesio, hierro y calcio. Quienes la consumen, reconocen utilizarla para unos productos y no otros, pero siempre es recomendable aplicarla en su medida justa a las infusiones.

Cuidar el consumo, buscar otra consistencia y darle otro sabor a lo que comemos o tomamos es una buena excusa para conocer un azúcar que no está tan arraigada en la cultura argentina e incorporarla en el día a día.

El arroz blanco

¿Quién no come o ha comido arroz blanco al menos, una o dos veces al mes? Hablamos de un alimento básico en todo sentido. Este tipo de arroz se identifica como un alimento saludable y dietético, pero no todo es lo que parece. Ahora, cuatro estudios realizados en Asia y países de occidente revelaron que comer regularmente un plato de arroz blanco puede elevar el riesgo de padecer diabetes tipo 2.

Así lo adelantó el portal especializado Su Medico, que agrega que esta enfermedad se relaciona con la ingesta de alimentos ricos en azúcares y carbohidratos, siendo el arroz blanco uno de ellos. El estudio fue realizado por científicos de la Escuela de Salud Pública de Harvard y publicado en la Revista Médica Británica (BMJ).

La conclusión de que un alto consumo de arroz blanco puede elevar significativamente el riesgo de padecer diabetes tipo 2 llegó tras analizar a decenas de países asiáticos y occidentales donde analizaron durante más de 20 años los casos de 352 mil personas sin diabetes tipo 2 de China, Japón, Estados Unidos y Australia. Al revisar los datos de tremendo estudio, detectaron que más de 13 mil de los participantes habían desarrollado diabetes tipo 2 por su consumo frecuente.

Técnicamente, ingerir un plato de arroz blanco con una porción de 158 gramos, ya es suficiente para poner en riesgo la salud y aumentar hasta en un 10% la probabilidad de desarrollar la enfermedad, con tendencia a afectar más a las mujeres que a los hombres. Para los expertos, esto se debe a que el arroz blanco es un carbohidrato que se convierte rápidamente en azúcares, un proceso conocido médicamente como Índice Glucémico (IG).