Hoy es el gran día. "Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi", dirigida por Rian Johnson, llega a las pantallas grandes de todo el país. Los fanáticos de la saga serán transportados a planetas extraños, con seres fantásticos y aventuras increíbles. Sin embargo, no hace falta viajar a una galaxia muy, muy lejana para vivir una experiencia Star Wars.

Tatooine o la luna de Endor parecerían ser escenarios creados especialmente para diferentes filmes de la franquicia, pero lo cierto es que las escenas que los tienen como escenario fueron grabadas en lugares reales del planeta Tierra, y no se necesita tener un Millennium Falcon para llegar a conocerlos.

Lago de Como Italia: Naboo, Episodio III

Muchas escenas del planeta Naboo fueron filmadas en el paradisíaco Lago de Como italiano, uno de los destinos preferidos del jet set internacional. Con villas remotas, panorámicas que quitan el aliento y un espíritu libre y distendido, sin dudas el viajero se sentirá en otra galaxia. Los hermosos jardines de la Villa del Balbianello -a los que se llega por medio de un taxi acuático- invitan a pasear y a sentirse en la piel de Padme. Otra locación utilizada fue el jardín público de Tremezzo (que fue eliminado en la versión final).

Isla de Yerba, Túnez: Tatooine, varios episodios

A pesar de que los áridos desiertos de Túnez sirvieron como el inolvidable set de la ciudad ficticia de Mos Espa, donde se crió el pequeño Anakin Skywalker, la isla de Yerba fue la locación principal utilizada para Tatooine. Aquí se filmaron por ejemplo las escenas en la cantina de Mos Eisley, y también se erige el Hotel Sidi Driss, que fue usado para los interiores del hogar de Luke Skywalker.

Parque estatal Redwoods, California: la luna de Endor, Episodio VI

Una caminata por el encantador parque estatal de Redwoods de California transportará a todo fanático de Star wars a un lugar muy especial. El Damnation Creek Trail lleva a los visitantes a un bosque soñado donde fantasearán con toparse con un Ewok. Queda a unas siete horas de San Francisco en auto, pero sin dudas vale la pena.

Skellig Michael, Irlanda: el escondite de Luke, Episodio VII

Skellig Michael, cuya traducción al castellano sería "Roca de Miguel", es conocida como "La gran Skellig", y pertenece al condado de Kerry. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1996 por su exótico paisaje rocoso. No extraña que Luke Skywalker haya escogido este remoto y bello lugar como escondite. Sólo es accesible por agua, y cuando los visitantes llegan al lugar pueden subir los 600 peldaños que llevan al monasterio del siglo VI.

Glaciar Hardangerjøkulen, Noruega: Hoth, Episodio V

Caminar por un glaciar es siempre una aventura. Pero el Hardangerjøkulen de Noruega es muy especial porque fue la locación de Hoth, un planeta que aparece en "El Imperio contraataca", quinto episodio de la saga. El glaciar se encuentra cerca del pueblito de Finse, que sólo es accesible en tren. Sólo se puede ir al glaciar con un tour guiado, de julio a septiembre.