La difusión de datos sobre el empleo público siempre genera un gran debate en la Argentina. En el último cambio de gobierno a nivel nacional fue uno de los temas más controvertidos ya que el presidente Mauricio Macri y su equipo de gobierno en más de una ocasión hicieron mención a la "herencia recibida" de la gestión anterior en referencia a la cantidad de gente empleada en el Estado. Por lo general, en esta discusión están quienes ven el empleo público como un gasto, mientras que otra perspectiva pone el acento en la necesidad de la presencia del Estado y eso, en gran parte, se tiene que dar a través de sus trabajadores.

En Santa Fe hay un empleado público cada 20,29 habitantes. El dato corresponde solo a los trabajadores del Estado provincial y en ese índice, de cantidad de habitantes por trabajador estatal, Santa Fe es la tercera provincia con menos trabajadores luego de Buenos Aires (uno cada 26,5 habitantes) y Córdoba (23,8), según un informe de la consultora Economía & Regiones, que no pudo determinar fielmente la información correspondiente a Santa Cruz.

En el otro extremo de la tabla, las provincias que más cantidad de personal tienen por habitante, se encuentran Catamarca (6,4 habitantes por empleado), La Rioja (6,69), Tierra del Fuego (7,1), Jujuy (7,9) y Neuquén (8,62), todas por debajo de los dos dígitos.

Otro de los datos a tener en cuenta es el crecimiento que tuvo la planta de personal de los estados subnacionales durante los últimos dos años. En este punto hay que marcar una gran diferencia –en la mayoría de las provincias– entre lo que sucedió en el período diciembre de 2014 a diciembre de 2015 y lo que pasó entre diciembre de 2015 y el mismo mes de 2016.

La provincia de Santa Fe tuvo un crecimiento del 0,6%, entre diciembre de 2015 y diciembre de 2016, ubicándose por debajo de la media nacional, que fue del 1%. En este período hubo cinco provincias que redujeron su planta de personal. Las mismas fueron Santiago del Estero (-1,7%), Mendoza (0,9%), Córdoba (0,4%) y Buenos Aires y San Luis, ambas con un 0,2%.

Mientras que un año antes, entre diciembre de 2014 y diciembre de 2015, en general las cosas fueron diferentes. El 2015 fue un año electoral y que en muchas provincias significó el cambio de gobierno. En ese período la provincia que más incremento porcentual tuvo fue Chaco con un crecimiento del 8,5%. Luego le siguieron Santiago del Estero (6,5%), Misiones (6,3%), Jujuy (6,2%), Salta (5,9%), La Rioja (5,1%) y Neuquén (5%). La que sigue en la lista es Santa Fe, que ese año aumentó un 4,9% su planta de personal, según el informe de E&R, y se ubicó 1,1% por sobre la media nacional.

En los distritos donde no hay un gran desarrollo productivo, el empleo público puede ser una forma de pelear contra la desocupación. Pero otra de las miradas posibles sobre el tema es analizar cuántas personas se necesitan para que los estados brinden, entre otros servicios esenciales, una buena prestación de salud, educación y seguridad a la población.